You might need therapy if you're consistently feeling down or nervous, struggling with life changes or stress, or facing issues that affect your daily life or relationships. Consider seeking help if you're dealing with unresolved trauma, seeking personal growth, unable to manage certain behaviors, or not seeing results from self-help strategies. Remember, therapy can be beneficial even if you're not in crisis.

Therapy is generally confidential, but there are a few exceptions. These include situations where there's a risk of harm to yourself or others, suspicion of abuse, legal subpoenas, or when you give written permission to share information. Your therapist will explain their confidentiality policies in detail during your first session.

In your first therapy session, you'll typically complete intake and meet your therapist. They'll discuss confidentiality, ask about your reasons for seeking therapy, and gather relevant background information. You'll have the opportunity to set initial goals and ask questions. Your therapist will likely outline a preliminary treatment plan and schedule your next appointment. This initial session focuses on information gathering and establishing rapport.

Teletherapy is a way to meet with your therapist through a video platform similar to Zoom or Facetime. Teletherapy is a safe, convenient way to do therapy right from the comfort of your own home or on your lunch break. If you are meeting for couples therapy, you can even access the video platform from different devices meaning you do not have to be in the same room for sessions. If you have a chronic illness or you’re homebound or bedbound, teletherapy allows you to still access therapy even when you’re not feeling well enough to travel. 

We use a HIPAA compliant, secure video platform through our electronic health record system Simple Practice to protect your privacy during sessions. You can access this video platform from your phone, laptop, or tablet just by clicking the link in your reminder texts and emails. 

To make the most out of teletherapy, we suggest you find a safe, private place for your sessions such as your home, your office, or a parked car. It also helps to have headphones for sound quality and privacy, if needed, and a solid internet connection. 

It can be perfectly normal to feel nervous or skeptical when you decide to start therapy. It can feel uncomfortable or scary for you to discuss certain topics or to even talk about feelings at all. We encourage you to be honest with your therapist about these feelings. Your therapist’s job is to reflect, validate, and explore your feelings with you, not to judge you. Being your authentic self can help you and your therapist understand your needs. You do not need to worry about over-sharing or being “polite”; you are allowed to ask questions and disagree with your therapist. 

Some people find it helpful to keep a journal in between sessions to process topics that come up during therapy. You might be surprised by the progress you make! You might also like to keep a list of subjects or questions that you would like to discuss in your upcoming sessions to help organize your thoughts. 

Although your therapist at Tucson Therapy and Consultation Services might be familiar with psychiatric medications, they cannot prescribe any medications. However, it is not unusual for your therapist to request your permission to coordinate care with your prescribing professional (such as a medical doctor, nurse practitioner, prescribing psychologist, etc). This ensures your mental health care professionals are communicating about treatment goals to give you the best care possible. 

Therapy sessions are typically 45–50 minutes long. The frequency of sessions can change as you progress in therapy. The length of therapy depends on many factors. 

Es posible que necesites terapia si te sientes constantemente deprimido o nervioso, si luchas con cambios en tu vida o estrés, o si enfrentas problemas que afectan tu vida diaria o tus relaciones. Considera buscar ayuda si estás lidiando con un trauma no resuelto, buscando crecimiento personal, incapaz de manejar ciertos comportamientos o no viendo resultados de las estrategias de autoayuda. Recuerde que la terapia puede ser beneficiosa incluso si no está en crisis.

La terapia es generalmente confidencial, pero hay algunas excepciones. Estas incluyen situaciones en las que existe un riesgo de daño a usted mismo o a otros, sospecha de abuso, citaciones legales o cuando da permiso por escrito para compartir información. Su terapeuta le explicará sus políticas de confidencialidad en detalle durante su primera sesión.

En tu primera sesión de terapia, por lo general, completarás la admisión y conocerás a tu terapeuta. Hablarán sobre la confidencialidad, le preguntarán sobre sus razones para buscar terapia y recopilarán información de antecedentes relevante. Tendrás la oportunidad de establecer metas iniciales y hacer preguntas. Es probable que el terapeuta esboce un plan de tratamiento preliminar y programe tu próxima cita. Esta sesión inicial se centra en la recopilación de información y el establecimiento de una buena relación.

La teleterapia es una forma de reunirse con su terapeuta a través de una plataforma de video similar a Zoom o Facetime. La teleterapia es una forma segura y conveniente de hacer terapia desde la comodidad de su hogar o en su hora de almuerzo. Si te reúnes para terapia, incluso puedes acceder a la plataforma de video desde diferentes lugares, lo que significa que no tienes que estar en la misma sala para las sesiones. Si tiene una enfermedad crónica o está confinado en casa o en cama, la teleterapia le permite seguir accediendo a la terapia incluso cuando no se siente lo suficientemente bien como para viajar.

Utilizamos una plataforma de video segura que cumple con HIPAA a través de nuestro sistema de registro de salud electrónico Simple Practice para proteger su privacidad durante las sesiones. Puede acceder a esta plataforma de video desde su teléfono, computadora portátil o tableta simplemente haciendo clic en el enlace de sus mensajes de texto y correos electrónicos de recordatorio.

Para aprovechar al máximo la teleterapia, le sugerimos que busque un lugar seguro y privado para sus sesiones, como su casa, su oficina o un automóvil estacionado. También ayuda tener audifonos/los auriculares para la calidad del sonido y la privacidad, si es necesario, y una conexión a Internet sólida.

Puede ser perfectamente normal sentirse nervioso o escéptico cuando decide comenzar la terapia. Puede ser incómodo o aterrador para usted hablar de ciertos temas o incluso hablar de sus sentimientos. Le animamos a que sea honesto con su terapeuta acerca de estos sentimientos. El trabajo de tu terapeuta es reflexionar, validar y explorar tus sentimientos contigo, no juzgarte. Ser tu auténtico yo puede ayudarte a ti y a tu terapeuta a entender tus necesidades. No tienes que preocuparte por compartir demasiado o ser "educado"; Se le permite hacer preguntas y estar en desacuerdo con su terapeuta.

A algunas personas les resulta útil llevar un diario entre sesiones para procesar los temas que surgen durante la terapia. ¡Te sorprenderá el progreso que haces! También puede mantener una lista de temas o preguntas que le gustaría discutir en sus próximas sesiones para ayudar a organizar sus pensamientos.

Aunque su terapeuta de Tucson Counseling and Consultation Services puede estar familiarizado con los medicamentos psiquiátricos, no puede recetar ningún medicamento. Sin embargo, no es inusual que su terapeuta solicite su permiso para coordinar la atención con el profesional que prescribe (como un médico, una enfermera practicante, un psicólogo que prescribe, etc.). Esto garantiza que los profesionales de la salud mental se comuniquen sobre los objetivos del tratamiento para brindarle la mejor atención posible.

Las sesiones de terapia suelen durar entre 45 y 60 minutos. La frecuencia de las sesiones puede cambiar a medida que avanza en la terapia. La duración de la terapia depende de muchos factores.